Aunque todos sabemos que estos robots que se convierten en autos son en realidad juguetes de Hasbro, la historia va mucho más allá, exactamente a 1984, cuando se los compran a la compañía japonesa Takara Tomy, quien hasta el día de hoy es en parte dueña de esta franquicia que ha alcanzado más de 25 mil millones de dólares en ganancias.

Al llegar al mercado americano, obviamente ellos no sabían cómo hacer que los niños se identificaran con un producto japonés, así que Marvel se encargó de hacer una historia de la mano de Jim Shooter, quien contrató en primer lugar a Dennis O’Neil, creativo que dio vida y le puso nombre a Optimus Prime, y a Bob Budiansky, que creó al resto de los robots.

Para el diseño, recurrieron a Shoji Kawamori, quien había saltado a la fama por su anime Macross, que en Estados Unidos se conoció como Robotech, razón por la que podrías ver una extraña similitud entre ellos.

Una vez lanzados los cómics, Transformers Generation 1 formó parte del Universo Marvel, por lo que en ocasiones había cameos de Spider-Man y Nick Fury, pero esa es otra historia.

En Filmatronik estaremos lanzando una nota cada día sobre esta saga hasta el estreno de Transformers One, la nueva cinta animada de Paramount Pictures que llegará a los cines este 12 de septiembre.