No estaba muy segura de querer darle una oportunidad a Rebel Ridge, la nueva cinta de Netflix creada por Jeremy Saulnier -conocido por Green Room, la cinta protagonizada por Patrick Stewart y el inolvidable Anton Yelchin, que murió en 2016 aplastado por su propia camioneta-, pero al ver que Empire le dio 4 estrellas de 5 mi interés comenzó a subir.
En Rebel Ridge vemos a un hombre llegar a un pequeño poblado con 36 mil dólares en efectivo para sacar de la cárcel a su primo, desafortunadamente es detenido por dos policías blancos quienes le acusan de transportar dinero para drogas, por lo que se lo quitan, pero como unos “buenos samaritanos” deciden dejarlo ir, un error que pagarán muy caro.
A diferencia de otras películas one-man-against-the-system, Terry (Aaron Pierre) nos entrega una historia bastante tranquila, incluso hasta inocente en un principio, con varias capas que se van destapando como si se tratara de una cinta de horror, con descubrimientos que no son explicados del todo, mientras va desarmando literalmente con sus propias manos al jefe de policía, un Don Johnson tremendamente corrupto, y con una actitud tan nefasta que nos recuerda mucho al personaje de Iosef (Alfie Allen) de John Wick, y más que lejano del carismático Hans Gruber de Alan Rickman en Duro de Matar.
Para intentar buscar la salida de su primo, Terry entra en menos de un minuto a la estación policiaca a buscar el dinero de la fianza, y para salir somete a una policía afroamericana, quien empatiza con su causa al darse cuenta de que el racismo existe, así como lo hemos visto en las noticias, con la muerte de George Floyd, Trayvon Martin, Eric Garner, Michael Brown y muchos otros, bajo la mano de la autoridad que está, supuestamente, para defendernos.
El eje central de este proyecto, se puede comparar con las declaraciones que desde hace pocos meses dio la Vicepresidenta Kamala Harris, quien pidió al Congreso reducir hasta en un 25% los presupuestos de la policía ante el incremento de corrupción y racismo en las filas de la fuerza de la ley, y es que la justificación que proclama el personaje de Johnson, es que para aumentar el dinero del pueblo y pagar las nóminas de la policía, inflan las fianzas hasta en un 500% de delincuentes juveniles, o pero aún, incautan el dinero de la gente bajo falsos cargos.
Aunque sí te mantiene al filo del asiento, la realidad es que no hay un exceso de acción o violencia como sí en otras películas, y se apoya enteramente en la historia y su problemática, algo que no necesariamente es bueno para su tercer acto, ya que después de la mitad sabes perfectamente lo que va a ocurrir.
Si estás en busca de una cinta palomera para pasar un fin de semana en tu cama y un montón de palomitas, Rebel Ridge es lo que necesitas.